Cicle de conferències sobre Género, sexo, medios de comunicación. Realidades, estrategias, utopías, organitzat pel Departamento de Periodismo de la Universidad del País Vasco, i celebrat a Bilbao.
La representación de la transformación de las relaciones
entre mujeres y hombres y del recambio generacional en la prensa.
Análisis y propuestas.[1]
Amparo Moreno Sardà
Catedrática de Historia de la Comunicación
Departamento de Periodismo de la
Universidad Autónoma de Barcelona
La exposición que voy a hacer se basa en la memoria del proyecto de investigación que estamos realizando un equipo del que forma parte la doctora Nati Abril, a la que quiero agraceder y felicitar por la organización de este ciclo de conferencias, junto con el doctor Manel López, profesor del Departamento de Periodismo de la UAB, la profesora de enseñanza secundaria, Isabel Alonso Dávila, y tres estudiantes de doctorado, Patricia Gómez, Núria Simelio y Soledad Vargas, que colaboran como becarias en el trabajo de campo y la explotación de los datos[2].
Este proyecto fue presentado al Instituto de la Mujer en la convotatoria de proyectos I+D de 2000, y ha recibido financiación para realizar la investigación durante 3 años (2001-2004). Actualmente nos encontramos en la primera fase de obtención y explotación de datos y no disponemos todavía de resultados. Por esta razón, sólo podré explicar los planteamientos teóricos que orientan las hipótesis, las hipótesis que estamos poniendo a prueba y la metodología que seguimos para validarlas.
De forma sintética, el objetivo de nuestra investigación es examinar la relación entre las transformaciones sociales que se han producido en las relaciones entre mujeres y hombres a lo largo del siglo XX, y los modelos masculinos y femeninos que han representado los medios de comunicación concretamente en las últimas décadas, desde la transición de la dictadura a la democracia. Se considera que las transformaciones sociales han favorecido que las generaciones más jóvenes disfruten de mayor igualdad de oportunidades y también que se enfrenten a nuevos problemas. Y se quiere investigar qué papel han jugado en estas transformaciones los distintos medios de comunicación al representar estos cambios con mayor o menor fidelidad, y presentarlos de forma positiva o negativa. De este modo, se pretende elaborar pautas para la lectura crítica y la producción de mensajes que fomenten una visión positiva y atractiva de una sociedad en la que se proclama la igualdad de oportunidades.
El título del proyecto pone de manifiesto algunos planteamientos de partida, resultado de investigaciones anteriores, tanto sobre el propio discurso académico, como instrumento epistemológico con el que se realiza el análisis, como sobre los medios de comunicación, objeto sobre el que se centra el estudio, ya que se considerar que la forma de nombrar el problema, y en consecuencia también de no nombrarlo, condiciona su definición y el diagnóstico y el tratamiento que hagamos. De forma resumida, estos planteamientos, que desarrollaremos a continuación, son los siguientes:
1. Marco teórico y metodología: la crítica al orden androcéntrico del discurso académico y de los medios de comunicación de masas
A lo largo del siglo XX, especialmente en el último cuarto, y en los primeros años del siglo XXI, se ha producido una notable transformación en las relaciones entre mujeres y hombres de distintas edades y condiciones sociales en los terrenos domésticos, laborales y profesionales, políticos, de ocio..., que han repercutido en los modelos de comportamiento que se representan en los medios de comunicación y se atribuyen a distintos colectivos sociales.
Estas transformaciones ha permitido que las generaciones más jóvenes disfruten de una mayor igualdad de oportunidades, pero también que tengan que enfrentarse a nuevos problemas derivados de la resistencia social al cambio, y de que el sistema de valores difundido por los medios y mediatizado por el mercado de consumo propugna unas relaciones más competitivas.
En las últimas décadas se han realizado numerosas investigaciones sobre la representación de las imágenes de la mujer en los medios de comunicación. El informe publicado en el año 2000 por el Instituto de la Mujer, Imágenes de las mujeres en los medios de comunicación[3], en el que han participado investigadoras de España y otros países de la Unión Europea bajo la dirección de Ullamaija Kivikuru, da cuenta de algunas investigaciones que han analizado las imágenes de las mujeres y los hombres en los medios de comunicación.
En las conclusiones de este informe se reconocen las principales lagunas en las investigaciones: falta estudios comparativos, estudios longitudinales que permitan medir los cambios a lo largo del tiempo, enfoques sistemáticos, y referencias a los métodos y resultados de la investigación (p. 64); es necesario investigar sobre la relación entre los medios de comunicación, las mujeres y la política, y si los medios prestan la atención suficiente a las necesidades y preferencias de los grupos étnicos y, en particular, a las mujeres de estos grupos (p. 66-67).
Además, se hacen recomendaciones para la investigación y la acción, de las cuales destacamos, porque guardan relación con este proyecto, el seguimiento regular y sistemático de las imágenes de género en el contenido de los medios de comunicación (p. 69); la investigación sobre el papel de los medios de comunicación en formar la percepción que se tiene de las mujeres que trabajan en el ámbito público y, especialmente, en la política (p. 70); la investigación sobre la representación en los medios de comunicación de los grupos étnicos, grupos de inmigrantes recientes y grupos minoritarios de mujeres (p. 70-71); la creación de redes para las mujeres a través de los nuevos medios de comunicación (p. 72); y la educación y formación para las mujeres en los nuevos medios de comunicación (p. 73-74).
El balance que se hace en este informe sobre la investigación realizada en España (p. 103 y siguientes) es parcial, debido a la selección de investigaciones se ha realizado a partir de las palabras clave que se indica al final de la obra: mujeres, imagen de las mujeres, estereotipos, género, masculino, femenino, feminismo, igualdad, distintos medios de comunicación, y educación.
Este repertorio es incompleto, ya que ignora las aportaciones realizadas en los ochenta a partir de la crítica al orden androcéntrico del discurso académico y de los medios de comunicación[4], crítica que se desarrolló en investigaciones financiadas por el Instituto de la Mujer, investigaciones que, en los años noventa, sirvieron de base para formular una metodología sistemática que permite analizar la representación en la prensa de los modelos de género, femeninos y masculinos, articulados con otras variables, como la edad, la etnia y la clase; relacionar estos modelos con los espacios sociales privados, públicos y marginales, y con las actuaciones y relaciones sociales correspondientes a estos espacios; realizar análisis históricos, longitudinales, que permiten detectar pervivencias y cambios; y realizar análisis comparativos entre informaciones y publicidad en un mismo medio, entre distintos medios, y entre los textos de los periódicos y los contextos históricos[5].
Es evidente que los resultados de las investigaciones están siempre condicionados por el enfoque que adoptan quienes las realizan, y este informe sobre las investigaciones en España adolece de lo que recrimina a todos los estudios realizados en los últimos años ya que parece haber sido emprendido partiendo de cero (p. 123), o, con más rigor, ignorando una parte y generalizando a partir de un análisis parcial.
Precisamente, este problema de generalizar conclusiones a partir de análisis parciales, reducidos a corpus limitados en el tiempo y en el tipo de medios, afecta a muchas de las investigaciones sobre los modelos de género en los medios de comunicación[6].
Así, en la investigación realizada por Concha FAGOAGA y Petra M. SECANELLA a principios de los años 80 sobre Umbrales de presencia de las mujeres en prensa española, sobre prensa diaria "de élite" y "popular", se concluía que los diarios presentan un mundo de imágenes masculinas que reafirma que los periódicos están hechos por varones para varones, y se atribuía el bajo porcentaje de referencias a mujeres a que éstas no están presentes en la agenda de acontecimientos previsibles, y no son portavoces de organismos burocráticos, ni fuente de información tradicional, ni han sido consideradas audiencia, todo lo cual restringe la posibilidad de que las nuevas generaciones de mujeres encuentren referencias suficientes para sus objetos vitales y profesionales[7].
Años después, las mismas autoras, a partir de una muestra recogida en canales de televisión de transmisión internacional vía satélite, afirmaban la persistencia de estos datos y concluían que las mujeres no existen salvo en el continuum de la presentación de programas, en los seriales y la publicidad[8].
A conclusiones similares llegaba Vicente BACA LAGOS al hacer un balance de las investigaciones realizadas en España sobre la imagen de la mujer en los medios de comunicación: los medios de comunicación se ajustan tardíamente a los nuevos roles adoptados por las mujeres, decía, si bien la publicidad moderniza la imagen de la mujer para atender a las necesidades derivadas de sus recientes roles[9].
Estudios posteriores han examinado también el tratamiento que la prensa definida como "de información general" hace de las mujeres[10]. Pero las conclusiones a que llegan no pueden generalizarse al conjunto de medios de comunicación, ya que están condicionadas por el mismo enfoque parcial de que parten, que condiciona la selección del corpus y el tratamiento de los datos en que se basan.
Examinar el tratamiento de las mujeres en los medios considerados "de información general" sólo permite ver cómo tratan algunos medios a las mujeres que han accedido a los escenarios públicos. Pero para evaluar correctamente el tratamiento de los modelos de género en el conjunto de la prensa o de los medios de comunicación, y percibir las pervivencias y los cambios a medida que se ha transformado la sociedad, hay que tener en cuenta la diferente representación de mujeres y hombres de diferentes edades y condiciones sociales en el conjunto diverso de medios de comunicación que enfocan no sólo el escenario público, sino otros espacios sociales, privados y marginales.
Ciertamente, el acceso a la vida política no es el único cambio social que las mujeres han protagonizado a lo largo del siglo XX y que han registrado los medios de comunicación de masas. Una mirada sobre los diversos medios de comunicación, incluida la publicidad que los financia, que abarque al conjunto de mujeres y hombres de distintas edades y condiciones sociales, permite tener en cuenta que los medios han registrado también otras muchas transformaciones sociales.
Así, desde una perspectiva más amplia, en una investigación sobre los contenidos de la publicidad y los programas cara al público en las cadenas de televisión que se captaban en Madrid, desde el verano de 1992 hasta el verano de 1993[11], Manuel MARTIN SERRANO llegaba a la conclusión de que no existen diferencias significativas entre los personajes masculinos y femeninos que aparecen en televisión, aunque se observa una mayor presencia de hombres en los programas (53 %) y de mujeres en los spots publicitarios (52 %). Y concluía que la televisión está especializada en tratar las cuestiones de la reproducción social que atañen al ámbito privado y a la vida cotidiana, más que las de la producción social propias del ámbito público; y las interacciones sociales (relaciones amorosas, familiares, amistosas, con sus problemas y gratificaciones, avenencias y desavenencias), de las que se ocupa una cuarta parte de los programas y la mitad de los spots publicitarios.
Conclusiones similares sobre las diferencias e incluso contradicciones entre las informaciones y la publicidad en la prensa se desprenden de las investigaciones que hemos realizado personalmente y de otras hemos dirigido[12]: los medios de comunicación de masas hablan de las transformaciones sociales que se han producido entre mujeres y hombres de distintas condiciones sociales que actúan en los distintos espacios sociales, privados, públicos y marginales, y al hacerlo construyen modelos femeninos y masculinos que articulan otras divisiones sociales que afectan a la edad, la clase social, la raza y otras variables, que reciben un tratamiento idealizado o dramático, positivo y negativo, que incita a la identificación de las posibilidades de integración y de marginación social.
La perspectiva de las investigaciones se enriquece, por tanto, al abrir el enfoque académico androcéntrico, incluso el enfoque "de género", y transitar por el conjunto de medios de comunicación más allá de los escenarios públicos, por otros espacios de la vida social, y por las múltiples y contradictorias relaciones sociales entre mujeres y hombres de distintas condiciones.
En consecuencia, nuestra investigación parte de tomar en consideración las aportaciones de los trabajos realizados hasta ahora desde distintas perspectivas, y también las lagunas señaladas en el informe publicado por el Instituto de la Mujer mencionado, con el objetivo de hacer un análisis sistemático, comparativo y longitudinal del conjunto de la prensa publicada en los últimos treinta años, para evaluar cómo se ha representado en la prensa, tanto en las informaciones como en la publicidad, la transformación de las relaciones entre mujeres y hombres y de los modelos de género, teniendo en cuenta el recambio generacional que se ha producido.
El objetivo final de este análisis es poder sentar las bases para definir nuevas pautas de lectura y de producción de materiales informativos y publicitarios que fomenten una visión atractiva la igualdad de oportunidades.
2. Hipótesis de trabajo
Partimos de la base de que los periódicos registran día a día la realidad social y los cambios que se producen y, por tanto, constituye una fuente documental para el estudio de las transformaciones históricas. Por ello es tan importante que la prensa de cuenta del conjunto de actividades y relaciones entre mujeres y hombres de distintas edades y condiciones sociales que construimos día a día la historia colectiva, de la forma más fidedigna posible y sin prejuicios.
Los diversos tipos de periódicos, a través de las informaciones y de la publicidad, han registrado, a lo largo de los últimos treinta años, los cambios que se han producido en la sociedad, y han representado la transformación de las relaciones entre mujeres y hombres de distintas condiciones sociales, y de los modelos de género masculinos y femeninos.
Pero esta representación no es transparente ni uniforme, y por tanto, que la prensa no puede utilizarse como fuente historiográfica sin conocer sus características. La representación simbólica de la realidad a través de la prensa se realiza mediante procedimientos que condicionan la selección y el tratamiento de los datos de la realidad, procedimientos que se aplican de distinta manera según el tipo de periódicos (diarios y revistas "de información general", "del corazón", dirigidas a distintos grupos sociales...), y según se elaboren en forma de informaciones o de publicidad. Estos procedimientos mediatizan la relación entre lo que sucede, lo que podemos considerar como la realidad, y lo que aparece en los periódicos, esto es, las representaciones simbólicas de la realidad que publican los periódicos, y repercuten en la diversidad e incluso las contradicciones que podemos advertir en las distintas representaciones de las relaciones sociales y modelos que aparecen en la prensa.
Un análisis meramente cuantitativo sólo informa del número de veces que aparecen en la prensa mujeres y hombres, y estos datos sólo pueden compararse con la cantidad de mujeres y hombres del conjunto social. Pero una análisis cuantitativo que contemple dimensión cualitativa, como el que proponemos, permite clarificar en qué medida los distintos procedimientos utilizados por las distintas publicaciones, en sus informaciones y en la publicidad, mediatizan el tratamiento que hacen de la realidad social de mujeres y hombres, y la imagen positiva o negativa que atribuyen a unas y otros, fomentando la integración y repudiando la marginación.
Pues bien, la hipótesis fundamental de nuestra investigación es que, la representación de la transformación de las relaciones entre mujeres y hombres de distintas edades y condiciones sociales a lo largo de los últimos treinta años, en los diferentes periódicos, y en las informaciones y la publicidad, no ha sido uniforme sino variada e incluso contradictoria: unos periódicos y productos periodísticos han sido más sensibles y permeables a los cambios, y han ofrecido imágenes más atractivas de estos cambios, mientras que otros han manifestado más resistencia, han sido más impermeables y han ofrecido imágenes menos atractivas de estos cambios.
Esta hipótesis fundamental se complementa con otras que tienen en cuenta las variables seleccionadas con el tipo de periódicos.
En primer lugar, cuestionamos la valoración androcéntrica académica que atribuye a la llamada "prensa de información general" una mayor capacidad de intervención en los cambios sociales y planteamientos más progresistas, y que menosprecia la prensa dirigida a las mujeres como insignificante y más resistente a los cambios.
Frente a est prejuicio androcéntrico, que condiciona muchos análisis sobre los medios de comunicación, incluso análisis realizados desde una perspectiva de género, nos proponemos probar que los periódicos definidos como "de información general", diarios y semanarios dirigidos fundamentalmente a los hombres vinculados a distintas instancias de poder, han manifestado más resistencia, han sido más impermeables a los cambios, y han ofrecido imágenes menos atractivas de estos cambios, en consecuencia, han fomentado la pervivencia de las relaciones y los modelos tradicionales; mientras que las publicaciones dirigidas preferentemente a las mujeres y al amplio público, semanarios del corazón, revistas femeninas..., han sido más sensibles y permeables a los cambios, y han ofrecido imágenes más atractivas y, en consecuencia, han fomentado la transformación de las relaciones y los modelos tradicionales.
En esta misma línea, nos proponemos probar también que las informaciones, especialmente las proporcionadas por la llamada "prensa de información general", han sido más resistentes y más impermeables a los cambios, y han ofrecido imágenes menos atractivas de estos cambios, en consecuencia, han fomentado la pervivencia de las relaciones y los modelos tradicionales; mientras que la publicidad ha sido más sensible y permeable a los cambios, ha ofrecido imágenes más atractivas de los mismos y, en consecuencia, ha fomentado la transformación de las relaciones y los modelos tradicionales.
La validación de estas hipótesis ayuda a comprender las dificultades con que se encuentran las mujeres que han accedido a los escenarios públicos, políticos, económicos y científicos, tradicionalmente reservados a los hombres, para hacer visible su presencia en los medios de comunicación que enfocan preferentemente a estos escenarios y, en consecuencia, para hacer atractivo este acceso.
También permite evaluar si es cierto que los medios de comunicación que enfocan preferentemente a los espacios y relaciones domésticas, y se dirigen específicamente a las mujeres, han presentado positivamente la transformación de las relaciones domésticas que ha impulsado a las mujeres a acceder a los escenarios públicos que históricamente le estaban vedados, y en consecuencia han fomentado una transformación mucho mas decisiva de lo que suele considerarse desde una perspectiva androcéntrica.
Pero la transformación de las relaciones sociales en los últimos años no ha sido uniforme entre mujeres y hombres, sino que se ha articulado con otras variables como la clase, el país y grupo étnico de procedencia en el caso de las personas que emigran, y las particularidades de los grupos minoritarios, que condicionan la disponibilidad de recursos económicos, posibilidades que se manifiestan en los distintos niveles de disfrute de los recursos necesarios para la supervivencia, y en los niveles de participación en el mercado de consumo, así como en la vida política y cultural. Y los medios de comunicación representan estas posibilidades con imágenes negativas o positivas, dramatizando la situación de mujeres y hombres que carecen de recursos y están situados en zonas de marginación, o idealizando la vida de quienes pueden disponer de ellos e integran los grupos acomodados.
Pues bien, suponemos que los medios y productos que manifiestan una mayor resistencia a la representación de la transformación de las relaciones entre mujeres y hombres, muestran también una mayor resistencia a dar cuenta de los problemas que afectan a mujeres y hombres que se encuentran en situaciones de marginación; mientras que aquellos medios que manifiestan mayor sensibilidad a la representación de la transformación de las relaciones sociales entre mujeres y hombres en los espacios domésticos, son también más sensibles a los problemas que afectan a mujeres y hombres que se encuentran en situaciones de marginación.
Una hipótesis similar nos proponemos probar en relación con la variable edad y con la representación que hacen los medios de comunicación del recambio generacional:
Suponemos que los medios y productos que manifiestan una mayor resistencia a la representación de la transformación de las relaciones entre mujeres y hombres, y de los modelos de género, muestran también mayor resistencia a dar cuenta de la situación de las generaciones más jóvenes; mientras que aquellos medios que manifiestan mayor sensibilidad a la representación de la transformación de las relaciones sociales entre mujeres y hombres en los espacios domésticos, tienen también más sensibilidad a la situación de mujeres y hombres de las generaciones más jóvenes.
Evaluar la mayor o menor sensibilidad de los distintos tipos de publicaciones para dar cuenta de la transformación de las relaciones entre mujeres y hombres de distintas edades y condiciones sociales, y para presentar estos cambios de forma más atractiva o dramática, ha de permitir elaborar unas pautas para la lectura crítica de la prensa adecuadas a la diversidad de representaciones que ofrece.
Además, esta evaluación, ha de permitir definir nuevas pautas para la producción de mensajes que fomenten una visión positiva y atractiva de las ventajas de una sociedad con relaciones de género equitativas, y en la que impere la igualdad de oportunidades. Pautas se que basarán en los procedimientos que utilizan los distintos periódicos para representar la realidad, y que se orientarán a proponer enfoques y tratamientos de la realidad más plurales y equitativos, y más acordes con una sociedad democrática.
En consecuencia, cumplir el primer objetivo de esta investigación enriquecerá el debate sobre la representación de la transformación de las relaciones entre mujeres y hombres, segundo objetivo, y facilitará cumplir el objetivo final que nos hemos propuesto, elaborar pautas para la lectura crítica de la prensa y para la producción de mensajes, adecuadas a las peculiaridades de los distintos periódicos, que fomenten una visión positiva y atractiva de las ventajas de una sociedad en la que impere la igualdad de oportunidades.
3. Metodología y técnicas de investigación
Para examinar las pervivencias y los cambios en la representación que los distintos periódicos han hecho de las transformaciones de las relaciones entre mujeres y hombres de distintas edades y condiciones sociales, y contrastar estas representaciones con las transformaciones que se han producido en la sociedad en las tres últimas décadas, nos basaremos en el análisis hemerográfico diacrónico automático tal como ha sido diseñado en La mirada informativa[13].
Para evaluar a qué mujeres y hombres ha prestado mayor o menor atención cada periódico en sus diversas unidades informativas y publicitarias, y qué tratamiento ha hecho de las diversas personas, se cuantifica qué cantidad de espacio les ha destinado, esto es, cómo ha distribuido su superficie impresa entre las distintas unidades comunicativas de la información y de la publicidad.
Este análisis cuantitativo de la distribución de la superficie impresa de que dispone cada periódico permite poner de manifiesno no sólo a quién ha enfocado de forma preferente o marginal, y a quien ha dejado fuera de su enfoque, sino también qué tratamiento positivo o negativo, idealizado o dramatizado, ha dado a las distintas mujeres y hombres de diferentes edades y condiciones sociales.
Para realizar este análisis se ha elaborado una ficha que permite recoger de forma sistemática y unívoca los datos explícitos que proporcionan los periódicos sobre los rasgos de los protagonistas de los que hablan en las diferentes unidades, las actuaciones con que son relacionados y los escenarios en los que son enfocados, y los aspectos formales, como la cantidad de espacio que se les concede y la página en que aparecen, así como los titulares, las ilustraciones y los textos, que colaboran a construir una imágenes positivas o negativas de los modelos que representan.
Este análisis se aplica a los ejemplares completos de la muestra seleccionada. Los datos se recopilan en una base de datos y se procesan mediante el programa SPSS. Los resultados permiten elaborar una radiografía de cómo ha evolucionado la atención que se ha prestado y el tratamiento se ha hecho de mujeres y hombres de distintas edades y condiciones sociales, pertenecientes a distintos grupos sociales que ocupan o no posiciones jerárquicas o marginales, en cada periódico a lo largo del período.
Tras este primer análisis cuantitativo de los ejemplares que componen la muestra, se explorará el resto de la colección para situar los cambios más notables detectados en la radiografía en los intervalos de los ejemplares seleccionados, y poder concluir un balance de la representación que ha hecho cada periódico de las relaciones entre mujeres y hombres a lo largo del periodo. Además, se realizará un análisis comparativo entre el conjunto de periódicos analizados.
Los resultados del análisis de los textos periodísticos se podrán comparar, así, con datos sobre los cambios sociales: los textos informativos y publicitarios, con el contexto histórico. A la vez, las publicaciones podrán utilizarse ya como fuente documental que proporcione nueva luz sobre las transformaciones sociales del periodo, transformaciones que de este modo no se reducirán sólo a los datos económicos o sociológicos convencionales, sino que comprenderán también el papel desempeñado por la prensa en las pervivencias y los cambios de las representaciones simbólicas.
4. Estrategias y utopías para otras explicaciones de la realidad que fomenten imágenes positivas de su transformación
Dado que nos encontramos en la fase de recogida y tratamiento de datos, no podemos extraer conclusiones y menos definir líneas de actuación. En todo caso, sí podemos afirmar que la crítica al orden androcéntrico del discurso académico nos proporciona criterios teóricos y metodológicos amplios para evitar incurrir en análisis reduccionistas, y abordar la diversidad contradictoria del repertorio de modelos y relaciones sociales que aparece en los medios de comunicación.
Tortosa, noviembre de 2002
[1] Conferencia pronunciada en el Ciclo de conferencias sobre Género, sexo y medios de comunicación. Realidades, estrategias y utopías, organizado por la Dra. Nati Abril, Departamento de Periodismo. Universidad del País Vasco, del 18-19 de noviembre de 2002
[2] Las personas que integran el equipo tiene una larga experiencia individual en investigación sobre medios de comunicación. Amparo Moreno, Natividad Abril y Manel Lopez están dirigiendo trabajos de doctorado y Tesis Doctorales relacionados con la prensa en el periodo de tiempo delimitado en esta investigación y con el tratamiento de las representaciones de mujeres y hombres en la prensa, y han trabajado conjuntamente en algunas ocasiones.
[3] Kivikuru, U. (2000), Imágenes de las mujeres en los medios de comunicación, Estudios en el marco del Programa de Acción Comunitario para la Igualdad de Oportunidades entre Hombres y Mujeres (1996-2000), Informe final, junio 1997, Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, Instituto de la Mujer, Madrid.
[4] Sobre la crítica al orden androcéntrico del discurso académico ver MORENO SARDA, A. (1986), El arquetipo Viril protagonista de la Historia. Ejercicios de lectura no-androcéntrica, LaSal, Barcelona, y (1988) La otra política de Aristóteles. Cultura de masas y divulgación del arquetipo viril, Icaria, Barcelona. Las repercusiones del androcentrismo académico en el análisis de los medios de comunicación de masas y la necesidad de adoptar un enfoque no-androcéntrico para comprender el tratamiento que hacen de las relaciones y los modelos de género, pueden verse en (1989), "En torno a la comprensión histórica de la cultura de masas. I, El orden androcéntrico del saber académico", ANALISI, UAB n. 12, pp. 81-91, y (1992) "En torno a la comprensión histórica de la cultura de masas. II, Paradigmas para una Historia de la Comunicación Social (No-Androcéntrica)", ANALISI, UAB n. 14, pp. 9-31; en (1990), "Los inicios de la cultura de masas (algunas observaciones no-androcéntricas)", ANALISI, UAB n. 13, pp. 137-143; en (1994) "Premsa de successos: models de marginació i integració social en els processos de mobilitat social", ANALISI, UAB, n. 16, pp. 35-54, y en otras publicaciones. Esta orientación la han tenido en cuenta otras investigadoras y la aplicamos a la investigación realizada por el Feminari Dona i Cultura de Masses del Departamento de Periodismo de la UAB, financiada por el Instituto de la Mujer en 1987-1988 y publicada en (1990) Prensa para mujeres o el discurso de lo privado: el caso del grupo HYMSA, en GARITAONANDIA, C., y otros (ed.), Comunicación, cultura y política durante la II República y la Guerra Civil, UPV, Bilbao, T. pp. 223-233.
[5] La metodología no-androcéntrica para analizar los medios de comunicación se ha expuesto en diversos trabajos y de forma sistemática en MORENO SARDA, A. (1998), La mirada informativa, Bosch, Barcelona.
[6] Tal como demostramos en nuestra Tesis Doctoral, la falacia del discurso académico actual no es sólo el androcentrismo, sino su opacidad a partir de generalizar como humano el modelo particular que en sentido estricto corresponde al Arquetipo Viril. En la misma falacia incurre este trabajo al generalizar lo particular.
[7] FAGOAGA, C. y SECANELLA, P. M. (1984), Umbrales de presencia de la mujer en la prensa española, Instituto de la Mujer, Madrid
[8] FAGOAGA, C., y SECANELLA, P. M. (1990), La presencia de las mujeres en los medios de comunicación, en PEÑA MARIN, C. y otros, La mujer en la publicidad, Instituto de la Mujer, Madrid.
[9] BACA LAGOS, V. (1995), El análisis de las Representaciones Sociales de los Géneros y los Estudios de la Mujer en España, en MARTIN SERRANO, M. Y E. Y BACA LAGOS, V., Las mujeres y la publicidad. Nosotras y vosotros según nos ve la televisión, Instituto de la Mujer, Madrid.
[10] Entre otros, ver ALTES, E., GALLEGO, J., BACH, M. et al. (1999), El sexe de la notícia. Reflexions sobre el gènere a la informació i recomanacions d'estil, Diputació de Barcelona; BUENO ABAD, J. R. et al. (1996), Estudio longitudinal de la presencia de la mujer en los medios de comunicación de prensa escrita, Nau, Valencia.
[11] Ver MARTIN SERRANO, M. y otros (1995), Las mujeres y la publicidad. Nosotras y Vosotros según nos ve la televisión, Instituto de la Mujer, Madrid.
[12] SOPEÑA I NUALART, A. (1991), La publicitat com a font documental per a la Història Contemporànea. El Hogar y la Moda, 1913-1931; ALONSO DÁVILA, I. (1991-1993), Cine y literatura, como fuente documental y materiales didácticos para la renovación de la Historia de Cataluña; SUÑÉ I BALCELLS, R. (1992), Anàlisi hemerogràfica diacrònica automatitzada: aplicació a EL PAÍS 1976-1991, Trabajo de doctorado, Departamento de Periodismo de la UAB; GONZALEZ ESCUDERO, E. (1994), Un asesinato para la historia. Lucrecia Perez, 13 de noviembre de 1992. Trabajo de Doctorado, Departamento de Periodismo de la UAB; y (2000), Redes sociales, comunicación y procesos de movilidad y asentamiento de emigrantes magrebíes en Alicante (1985-1995), Tesis Doctoral, Departamento de Periodismo de la UAB; MOLINA, P. M. (1995), Utilización didáctica de la prensa del corazón en la etapa instrumental de la formación básica de adultos, Trabajo de Doctorado, Departamento de Periodismo de la UAB; SANCHEZ MENENDEZ, J. (1998), La representación de realidades sociales marginales en prensa diaria: la prostitución en las informaciones y la publicidad de EL PERIODICO y LA VANGUARDIA, Trabajo de Doctorado, Departamento de Periodismo de la UAB; VEGA, E. (2001), La construcción del cuerpo andrógino en los videoclips de Michael Jackson y Madonna, Trabajo de doctorado, Departamento de Periodismo de la UAB; SIMELIO, N. (2001), Paper i influència de la premsa diària d'informació general durant la transició espanyola (1973-1983), Trabajo de doctorado, Departamento de Periodismo de la UAB; OSORIO, Z. (2001), Las imágenes del periódico, Trabajo de doctorado, Departamento de Periodismo de la UAB; QUINAYAS, G. (2002), EL CASO, Semanario de sucesos. Una crónica de los procesos de movilidad social durante la Dictadura de Franco, Trabajo de doctorado, Departamento de Periodismo de la UAB; (2002), DE SAN MARTIN, L. E. (2002), La mirada informativa del vespertino TAL CUAL sobre la sociedad venezonala (2000-2001), Trabajo de doctorado, Departamento de Periodismo de la UAB.
[13] Ver MORENO SARDÀ, A. (1998), La mirada informativa, Bosch, Barcelona.